Un final infeliz
15 de febrero de 1999
Me despido de Carolina, pidiéndole disculpas por haberme entrometido en su vida. Lo único que he pretendido ha sido entender a ese hombre para deshacer el hechizo amoroso que me ha lanzado. No quiero de ninguna manera hacerle daño a ella, que se ha convertido en la esclava de un monstruo que tan sólo siente egoísmo y rabia hacia el género femenino.
Supongo que, con el tiempo, Carolina me odiará por haber hecho eso.