20 de julio de 1998
Me siento feliz porque esta mañana nos hemos mudado. El traslado ha sido rápido, en media mañana, ya que yo tengo poca cosa. Jaime ha traído solamente ropa de casa de su madre, donde se aloja, y unos cuadros que, según él, le ha regalado su padre de su colección privada, y que son valiosísimos. Es poca cosa para un piso tan grande y necesitamos sin duda muchos muebles.
Por la tarde, ya estamos visitando todas las tiendas de muebles del barrio, y cuando nos hemos decidido sobre lo que queremos, Jaime insiste en pagarlo todo, pese a mi negativa, ya que quiero compartir los gastos.