¿Es normal sentirse celoso por la atención que mi esposa le dispensa al perro?
Esto sonaráa pregunta extraña, pero es un serio problema en mi matrimonio. Creo que mi esposa ama a nuestro perro más que a mí. Tenemos a Sparky, un Golden Retriever, desde hace seis años. Su esposa siempre estáabrazándolo y besándolo y actúa con mayor excitación por verlo cuando entra en la habitación de lo que lo hace cuando yo vuelvo a casa del trabajo. Para mi esposa. Sparky nunca hace nada malo ni equivocado, pero ella siempre se estáquejando acerca de míy de que no le hago caso. Yo lo intento, pero Sparky siempre llega antes. Naturalmente, Sparky duerme con nosotros, o quizás debería decir con mi esposa, en su lado de la cama, de modo que ni siquiera tengo la oportunidad de practicar mucho el sexo.¿Hay alguna solución para esta situaciónSupongo que ese famoso dicho de«el perro es el mejor amigo del hombre»no es aplicable a tu caso,¿verdad? Bien, tengo la solución: necesitas mostrarle a tu esposa que la amas del mismo modo que tu perro Sparky demuestra que la ama. No, no estoy sugiriendo que te pongas a cuatro patas y vayas a buscar una pelota de tenis. Pero, en serio, observa a Sparkypor unos días y date cuenta de cómo se conduce con tu esposa:
• Cuandoél quiere muestras cariñosas de ella, lo cual vale tanto como decir siempre,él no espera a ver si ella estáde humor: corre hacia ella, frota su cuerpo contra el suyo y le hace saber queél estádispuesto.
• Cuando tu esposa vuelve a casa,él se dirige encantado hacia la puerta y se conduce como si estuviera encantadísimo de verla, aun cuando ella sólo haya salido un par de minutos a recoger el correo.
• Cuando tu mujer se siente un poco abatida,él nunca supone que«ya lo superará»y la deja sola; en su lugar,él se acerca más a ella, sólo para darle a entender que ella es amada.
• Cuando tu esposa le da algo a Sparky,sea la comida, una galleta, una bola de goma o una chuleta de juguete,él lo recibe como si ella lo hubiera bendecido con el más increíble regalo del mundo, estálleno de gratitud por la más mínima ofrenda.
• Sparkynunca pierde la oportunidad de darle a tu esposa un beso, una hocicada, un lametón.Él nunca piensa para sí:«La he besado hace una hora»o«esperaréhasta después de comer». Para Sparky,cualquier momento es bueno para el amor, cuanto más a menudo mejor.
Lo que comprobarás si observas atentamente el comportamiento de Sparkyes lo generosa y sólidamente que ama a tu esposa. Nunca se retrae, nunca esconde sus sentimientos, nunca economiza su amor por ella, nunca da algo por supuesto respecto de ella. Y en respuesta a esa actitud, tu esposa ama a Sparkydel modo que túdescribes. Por lo tanto, tiene mucho sentido para míque si túquieres que te amara así, túhayas de amarla como lo hace Sparky.Apasionadamente, devotamente. Veinticuatro horas al día. Y sin preocuparte de convertirte en un loco. Guau, guau...