¿Cómo puedes saber si alguien está realmente comprometido con una relación?
A mi pareja siempre sostiene que me aquíy que quiere estar conmigo, pero cuando se trata de construir ese«nosotros» él continuamente me decepciona. Cada vez que le explico por quésoy infeliz o le digo lo que espero deél para poder seguir juntos,él se disculpa y me promete cambiar. Si le presiono un poco más,él se pone a la defensiva y me dice:«Estoy en ello». La cuestión estáen que nada ha cambiado, y mucho me temo que nada cambiará, pero yo séqueél me ama de verdad y yo no quiero perderlo.¿Cómo puedo saber siél es serio acerca de nuestra relación?
Antes de nada, lee la respuesta a la pregunta 14, porque sirve para tu situación. Esto te ayudaráa comprender cómo preguntarle siél es serio acerca de la relación, y siél quiere mantener el mismo tipo de relación que tú. Siél insiste en que sí, y que verdaderamente quiere cambiar, necesitas plantearle dos problemas fundamentales: 1) quécompromisos necesitas por su parte; y 2) cómo tiene pensado trabajar sobre símismo para cumplir esos compromisos.
Tengo la sensación de que, en tu caso, tu pareja realmente es sincera cuando dice que quiere estar contigo y que trabaja sobre la mejor manera de conseguirlo. El problema puede estar en queél no comprenda plenamenteQUÉes aquello sobre lo que debe trabajaryen que no tenga una clave acerca deCÓMOtrabajar sobre esos problemas. A riesgo de sonar sexista, debo decir que he visto esta situación incontables veces con hombres cuyas esposas o novias se quejan de las mismas frustraciones que tú. Esos hombres suelen ser, a menudo, demasiado orgullosos o tímidos para decirles a sus mujeres:«Mira, séque tengo que cambiar, pero para ser sincero contigo, he de decirte que no tengo ni idea de quées exactamente lo que túquieres que cambie, y menos aún de cómo podría realizar esos misteriosos cambios». En vez de eso, suelen decir:«Estoy en ello»o«deja de presionarme», esperando ganar tiempo para entender quées lo que se supone que han de hacer.
Si eres una mujer y estás leyendo esto, probablemente pienses:«Va, Bárbara, quétiene de tan complicado el pedirle a tu marido mayor intimidad o que comparta más sus sentimientos?¿Cómo le pueden resultar duras de comprender esas peticiones?». Esta es mi respuesta:¡les cuesta más de lo que puedas imaginar! La mayoría de las mujeres estámás familiarizada con su mundo interior de sentimientos de lo que lo estála mayoría de los hombres. Nosotras comprendemos naturalmente lo que significa«abrirse», dejar que«alguien entre en ti»o«entregarse al momento». Sin embargo, para muchos hombres esos conceptos son extraños, e incluso les espantan.
He descubierto que cuanto más claras y específicas, verbal mente, sean las mujeres a la hora de definir quéconducta les gustaría que desarrollaran sus parejas, además de ofrecerles las herramientas más precisas para ayudarles a hacer esos cambios, más deseosos están los hombres, de hecho, de trabajar para conseguirlos.
He aquíun ejercicio extraído de mi libro How to Aíake Love All The Timeque ha ayudado a cientos de miles de parejas a aprender cómo trabajar para mejorar su relación. Particularmente, he recibido una maravillosa respuesta por parte de hombres que a través de este ejercicio lograron comprender verdaderamente lo que sus esposas necesitaban y les dio ideas sobre cómo satisfacer específicamente esas necesidades.
En un lado de una hoja de papel haz una lista de todas las cosas que necesitas de tu pareja, el modo como re gustaría que cambiase. Después, en la columna de al lado escribe, junto a cada uno de los artículos escritos antes, cómo podríaél demostrar su compromiso para satisfacer esa necesidad.
Te sorprenderáel poder y la eficacia de este método. A menudo el hombre responderádiciendo:«¿Ah, eso es a lo que túllamas ser abierto? Pues eso síque puedo hacerlo». Y túpiensas para ti:«¿Cómo es que te ha llevado tanto tiempo comprenderlo?». Quizásél echaba de menos elCÓMO«trabajar sobre ello». Naturalmente, ambos miembros de la pareja deben hacer el ejercicio propuesto. Sugiéreselo a tu pareja. Afortunadamente, le proveeráde las herramientas queél andaba buscando para darte lo que túnecesitabas y, como un regalo extra, para expresar incluso sus propias necesidades. Una vez que esto funcione, comprobarás que túpareja se muestra mucho menos a la defensiva a la hora de cambiar, y túpuedes seguir explorando otros métodos de transformación conjunta: cintas, seminarios, terapia, etc.