¿Cómo puede una pareja con niños mantener una vida sexual espontánea y excitante?
Considero que mi pareja y yo disfrutamos de un excelente matrimonio, pero con dos niños pequeños, el sexo espontáneo parece ser una cosa del pasado.¿Tienes algunas ideas que nos puedan ayudar a tener el tipo de vida sexual excitante que teníamos antes de que nacieran los niños?
Si yo te contestara«sí, vuestra vida sexual puede ser tan espontánea y salvaje como lo era cuando vivíais solos en vuestra casa sin niños llorando, luchando, jugando, poniéndose enfermos, preguntando a todas horas, buscando tu atención, cansándote todo el día y colándose en tu habitación por la noche»túpensarías que yo lo he vivido...¡y acertarías! Como todos los padres saben, los niños cambian radicalmente tu vida, incluyendo tus relaciones sexuales. Y aunque ciertamente no es fácil, es importante que mantengas una satisfactoria y apasionada vida sexual.
La llave es«planear la espontaneidad». Túsabes que, con niños en la casa, has perdido la libertad que tenías para agarrarte a la ocasión y disfrutar del sexo apasionadamente siempre que aquélla se presente. Si esperas que vuelvan esos momentos, puede que esperes eternamente... bueno, al menos unos cuantos años. En vez de eso, túpuedes planificar un tiempo en que la pasión espontánea pueda producirse.
Por ejemplo, arréglalo todo para dejar tus hijos con una amistad o un familiar durante unas horas una tarde del fin de semana. Túy tu pareja sabéis por anticipado que esa es vuestra tarde para estar solos juntos. Eso no significa necesariamente que hayáis de tener relaciones sexuales; eso significa que queréis compartir algunos momentos de intimidad, centrándoos en vosotros y no en los niños. Podéis acabar dando un paseo, abrazados en el sofáfrente a una vieja película, dándoos un masaje o sencillamente estando juntos y disfrutando de la paz. En ese momento especial, muchas cosas sucederán espontáneamente, y una de ellas puede ser el sexo.
Séque algunas parejas contratan a un canguro para que vigile a los niños o se los lleve al parque, para que los padres puedan disfrutar de alguna privacidad en su propia casa, sin preocuparse de quéestán haciendo los niños. Otros se ponen de acuerdo con amigos que también tienen niños. Tendrás que ser creativa, pero la idea no es sólo planear, sino programar un tiempo libre a la semana o al mes, del mismo modo que estableces una cita con el dentista..., sólo que esa cita es con tu amante (y seráprobablemente mucho más placentera.)
No olvides que lo que hace que esto funciones no es que túestés planeando tener una relación sexual, sino que estás planeando pasar un tiempo solos y juntos. Las parejas cometen a menudo el error de planear disponer sólo de unas pocas horas y de decidir, por adelantado, que tendrán un encuentro sexual. Esto no sólo te presiona para que te pongas a tono instantáneamente, sino que no te da la oportunidad de descubrir tu deseo por el otro en el momento. Cuando planeas compartir un tiempo de intimidad, sin nociones preconcebidas de lo que puede ocurrir, creas el espacio para que se desarrolle tu inclinación natural a animarte y para que crezca la pasión de tu amor, igual que sucedía cuando disfrutabais de vuestro tiempo juntos antes de tener los niños.
Una palabra de precaución, especialmente para las madres sobreprotectoras: este plan requiere abandonar algo por tu parte, especialmente la preocupación de que tus hijos no estén bien atendidos si túno estás con ellos las veinticuatro horas del día. Escoge a las personas que se encarguen de ellos con mucho cuidado y luego relájate: los chicos estarán bien. Y lo más importante: aprenderás que pueden sobrevivir sin ti (¡triste pero cierto, mamás!) Y, en el proceso, tendrás la oportunidad de enamorarte una y otra vez de tu marido.