¿Qué significa que una pareja nunca se pelee? ¿Puede esto dañar una relación?

A veces me pregunto si algo va mal en mi matrimonio, pues mi pareja y yo nunca nos peleamos, y ni tan siquiera tenemos algún desacuerdo. Provenimos ambos de hogares muy estrictos y religiosos y nunca vimos discutir a nuestros padres tampoco. Nos llevamos muy bien, pero uno no se atrevería a llamar apasionada a nuestra relación. Es más bien calmada y preocupada.¿Nos estamos perdiendo algo?

¡Sí, y se llama sinceridad! No importa lo compatibles que seáis túy tu pareja, porque al fin y al cabo sois dos seres humanosúnicos y diferentes. Por esa razón es inevitable que no lo veáis todo como por unos solos ojos a lo largo de toda vuestra vida juntos, excepto que jamás queráis molestaros, temerosos de que zozobre el bote de vuestra convivencia, y me temo que eso es exactamente lo que estáis haciendo. Las parejas que nunca tienen motivos de desacuerdo están comprometidas en lo que yo llamo un«cariño cauteloso». Uno o ambos componentes de la pareja temen que cualquier conflicto, de cualquier clase, resulte peligroso para la relación, de modo que los evitan a toda costa.¿El resultado? Un matrimonio tan consistente como aburrido.

Túmisma lo has dicho: vuestra relación no es apasionada. Eso se debe a que,-como ya he tratado sobre ello al describir el mapa emocional (véase la pregunta 38), cuando suprimes todas las emociones desagradables, tales como la ira, la irritación, el dolor o la tristeza, también acabas llevándote por delante el amor y la pasión. Túsientes que«amo a mi pareja, pero no me siento "enamorada"». Estás matando la pasión con la amabilidad. Incluso aunque los problemas que túpretendes que no existe n entre vosotros pueden no ser muy significativos por ellos mismos, es tu decisión de ignorarlos lo que es significativo, porque adormeciendo tu dolor en ti misma te estás robando la habilidad de sentir una gran alegría.

De hecho túya sospechas que túy tu pareja, en vuestro proceso de formación, tomasteis algunas decisiones inconscientes y poco saludables acerca de lo poco seguro que os parecía expresar cualquier sentimiento desagradable. Los niños de hogares muy estrictos o religiosamente dogmáticos a menudo no tienen permiso para expresar emociones«impías». Incluso se les puede haber enseñado que sentir emociones como la ira, el resentimiento o incluso el miedo es pecado, o un signo de falta de fe. Asíes como tu pareja hace algo que te molesta y túinconsciente y automáticamente suprimes ese sentimiento, sin permitirte siquiera reconocer su existencia. Cuando este patrón de supresiones se vuelve recurrente, acabas en un matrimonio al que le falta vitalidad, sinceridad y una unión apasionada entre ambos.

La buena noticia es que tanto túcomo tu pareja parecéis dispuestos a cambiar. Estableced un nuevo compromiso para construir una relación basada en la comunicación total de todos vuestros sentimientos. Leed, asistid a clases y haced todo cuanto estéa vuestro alcance para educaros a vosotros mismos sobre cómo tener una relación dinámica eíntima. Confiad en vuestro matrimonio lo bastante como para saber que no sólo resistirálos desacuerdos e incluso las disputas, sino que se volverámás fuerte cada vez que superéis un conflicto y establezcáis de nuevo el amor entre vosotros las preguntas 37 y 38